Recolecciones se trata de una serie ilimitada de fotografías de gran formato (90 x 150 cm) que comenzaron a ser captadas desde el año 2016. Estas representan diferentes texturas y elementos de la naturaleza que han sido inmortalizados por la artista a lo largo de sus viajes por Chile. Los registros junto con dar cuenta de la exploración de la autora a lo largo del país también enfatizan la curiosidad que va despertando en ella el encuentro con estos elementos, el cuestionamiento sobre los procesos que la materia debió experimentar hasta adquirir su forma actual y, en definitiva, la profunda emoción del hallazgo.

 

       Este trabajo se plantea desde una dimensión intimista en la que la conexión con la naturaleza a partir de la percepción de sus sonidos, olores y colores: y, en definitiva, de su inabarcable diversidad, es un elemento central. En este encuentro contemplativo con el paisaje, en palabras de la autora: “me gusta pensar en los miles de años que debió pasar una pequeña superficie para convertirse en lo que es hoy. Siento agradecimiento por tener la suerte de topármela y, de allí, surge la necesidad por conservarlo para mí, lo que consigo a través de la fotografía”.

 

      Lucía se concentra en aspectos imperceptibles, los cuales vuelve evidentes a partir del cambio de escala que posibilita la fotografía con lo que va construyendo sus “micropaisajes”. Este concepto, acuñado por la propia artista, le sirve precisamente para destacar que las pequeñas superficies que captura –entre 5 a 40 cm de extensión–, constituyen escenarios en sí mismos, en los que los diferentes colores, texturas, accidentes y patrones proponen un recorrido metonímico en el que un fragmento remite a la inmensidad del todo paisajístico. El objetivo que subyace es el afán por capturar el instante fugaz en el que determinadas condiciones atmosféricas y geológicas han afectado la apariencia de la materia, construyendo un ideal de belleza propio que destaca por su carácter frágil.

 

      En cuanto a los procedimientos técnicos, Lucía emplea fotografía digital, un trípode y luz natural, y a la hora de seleccionar el encuadre, considera algún patrón que unifique a la imagen. Una vez que regresa a su estudio ordena, selecciona y organiza el proceso de edición, el que se remite principalmente al mejoramiento de la luz pues busca mantener la naturalidad de la toma. Un aspecto relevante es que la artista registra la fecha, ubicación y altura de cada una de las fotos pues esto se relaciona directamente con el sentido de bitácora que tienen cada una de sus fotos, reeditando el modo en que los artistas viajeros y los naturalistas del siglo XIX fueron inventariando la naturaleza que encontraron en sus recorridos por Chile.  

 

 

Información técnica

Serie Recolecciones, 2016-

Fotografía digital

Impresión Fine Art sobre papel Canson luster laminado

90 x 150 cm